Tu cuerpo es mi alma y mi alma en tu cuerpo como un momento.
El entrenamiento es tu pasion y mi tecnica.
Tu entrenamiento es mi pasion en tu pasion en tu movimiento, en tu gesto.
Entrenar tiene que salir e dentro.
Tienes que atar el universo en tu vientre.
Un estado poetico de contingencia del alma que aflora en una pasion inusitada que decae el gesto en el temblor delicado de tu cuerpo.
Es la mayor osadia, alcanzar ese universo inconstante que es tu emocion y que yo trato de envolver en un atril hecho altar para ti.
El amor contenido y mirado en un gesto suave que provoca que tu cuerpo reflejado en el espejo, trascienda los rayos iniciales de la posibilidad de alcanzar un paraiso de silencio.
Y en ello te mueves de una forma tan lenta que lo suave se vuelve mas suave y lo delicado alcanza a lo etereo.
Mientras el dia se exiende por tu cuerpo con la mism tranquilidad que el viento de los pensamientos en la tormenta que se acalla.
Yo sigo entrenando a personas pero tu alma aguarda.
...no le busques sentido, no lo tiene.
maestro zen
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